
Al aire libre y sin condiciones adecuadas:
Beneficiarios de pensiones no contributivas enfrentan largas filas en San Ignacio y San Pedro
Personas con discapacidad y sus familias debieron movilizarse por sus propios medios para recibir cartas documento y revalidar sus datos. En ambos municipios, el operativo se realizó al aire libre, con filas extensas, demoras y sin condiciones que contemplen la vulnerabilidad de los beneficiarios.
Tras el escandalo nacional por presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) la revalidación de datos para beneficiarios de pensiones no contributivas en Misiones se está desarrollando en condiciones que generaron críticas y malestar entre las personas con discapacidad y sus familias. Tanto en San Ignacio como en San Pedro, los operativos se organizaron en espacios abiertos y sin previsión de accesibilidad, lo que obligó a cientos de personas a movilizarse y esperar en largas filas para poder cumplir con un trámite fundamental para la continuidad de su pensión.
San Ignacio: trámite frente a la reducción jesuítica
En la localidad de San Ignacio, los beneficiarios fueron citados mediante carta documento para presentarse en un operativo de actualización de datos. El lugar designado fue un espacio abierto frente a la reducción jesuítica, al aire libre y sin condiciones de resguardo frente al clima.
La decisión despertó cuestionamientos: familias enteras debieron trasladarse con dificultad, algunas personas en sillas de ruedas dependieron de vehículos prestados, y muchos soportaron esperas prolongadas sin un espacio adaptado. Lejos de ofrecer una alternativa más accesible, las autoridades se limitaron a recibir la documentación de manera presencial.
“Las personas fueron notificadas con carta documento para que se acerquen a actualizar sus datos”, explicó Fernando Cejas, a cargo del proceso. Sin embargo, esa modalidad implica que justamente quienes más dificultades tienen para movilizarse deban hacerlo, sin contemplar la posibilidad de descentralizar el trámite en los municipios o habilitar opciones digitales.
San Pedro: filas de tres cuadras y miles de personas citadas
En San Pedro, la situación no fue menos compleja. Desde primeras horas de la mañana, cientos de personas se congregaron en el Polideportivo Municipal para retirar cartas documento. En total, unas tres mil personas deben recibir el telegrama que las cita a presentarse el 13 de septiembre en el Centro de Salud local, ubicado sobre calle Chubut, con estudios firmados por profesionales que certifiquen su discapacidad.
La concurrencia fue masiva: las filas se extendieron por tres cuadras y se estima que solo en la primera jornada se entregaron alrededor de 1.500 cartas. El operativo continuará hasta mañana viernes. En el lugar trabajan siete empleados de la empresa de correo, pero todo se realiza de manera manual y presencial, lo que generó demoras y mayor incomodidad.
Según el comunicado difundido por la Dirección de Acción Social de la Municipalidad, quienes no puedan asistir personalmente podrán enviar a un tutor legal o un mayor de edad con su DNI y el del titular. Sin embargo, la necesidad de concurrir en persona al operativo volvió a exponer las dificultades de movilidad y acceso que enfrentan quienes viven en zonas rurales o alejadas.
Falta de sensibilidad y riesgos de exclusión
Tanto en San Ignacio como en San Pedro, las quejas se multiplicaron. Beneficiarios y familiares cuestionaron la falta de consideración de las autoridades para organizar un trámite que afecta directamente a un sector vulnerable y dependiente de esta ayuda económica.
Más allá de la masividad del operativo, el procedimiento dejó en evidencia la desorganización y la ausencia de un enfoque inclusivo: largas filas bajo el sol, falta de infraestructura adecuada, trámites presenciales obligatorios y tiempos reducidos para presentar documentación médica en localidades donde no siempre hay disponibilidad de profesionales idóneos.
Lo que debería ser una instancia de acompañamiento y garantía de derechos terminó convirtiéndose en un obstáculo engorroso que, lejos de facilitar, complejizó aún más la vida de quienes dependen de las pensiones no contributivas para subsistir.
Fuente: https://misionesonline.net