
Nacionales | El ingreso de ropa importada crece un 150%
La industria textil pierde 10.000 empleos desde la asunción de Milei
En los primeros cinco meses de 2025 se importaron 12 millones de kilos de ropa, lo que equivale a 60 millones de prendas, sin contar las compras personales al exterior.
En lo que va del 2025, la importación de ropa terminada creció un alarmante 150% respecto al año anterior. En los primeros cinco meses del año se ingresaron 12 millones de kilos de ropa, lo que equivale a 60 millones de prendas, un dato que no incluye las compras realizadas a través de plataformas de comercio electrónico ni las compras personales hechas en viajes. Este fenómeno ha afectado gravemente a la industria textil nacional, que ya ha perdido más de 10.000 puestos de trabajo desde que asumió el gobierno de Javier Milei.
La presencia de gigantes del comercio electrónico como Shein y Temu, que ingresan productos sin pagar impuestos y con cero controles, ha empeorado la situación. Estas plataformas tienen precios extremadamente bajos, lo que dificulta la competitividad de las empresas nacionales. Luciano Galfione, presidente de la Fundación ProTejer, explica que el impacto de estas tiendas internacionales es difícil de medir, ya que sus productos ingresan al país mediante couriers y no están sujetos a los controles aduaneros. Además, los productos de estas plataformas no están sometidos a regulaciones laborales ni ambientales, lo que genera una competencia desleal.
“No hay manera de medir el impacto de tiendas internacionales como Shein porque ingresan vía courier y con una política de comercialización muy agresiva. Aprovechan que el Gobierno sacó todos los controles a las importaciones y se puede comprar hasta 400 dólares sin pagar impuestos», señaló Galfione. También advirtió que la falta de controles sobre la producción y la calidad de estas prendas representa un riesgo para los consumidores, ya que las prendas pueden estar fabricadas con materiales contaminantes o químicos peligrosos para la salud.
La situación de las empresas textiles locales es grave. Según Galfione, muchas fábricas están operando a solo el 40% de su capacidad, lo que ha llevado a cierres y suspensiones. “Hasta ahora, desde que asumió Milei perdimos 10.000 puestos de trabajo, pero el crecimiento será exponencial. Si seguimos así, habrá quiebras y una gran pérdida de puestos de trabajo”, alertó el presidente de la Fundación ProTejer.
Además, el presidente de la fundación reveló que el sector textil ha intentado discutir sus preocupaciones con el gobierno, pero se les ha respondido que la política de desregulación comercial es una decisión tomada para beneficiar al consumidor. Sin embargo, Galfione expresó su descontento con esta postura y destacó que las Pymes, que representan el 95% del sector, dependen de un modelo que favorezca el trabajo local y la producción nacional.
“La política económica no está tomando en cuenta las consecuencias humanas. Es fácil decir desde un escritorio que hay que echar gente, pero nosotros conocemos a nuestros empleados, sus historias. No se puede pedir que se cierren empresas sin entender lo que esto significa para las familias de nuestros trabajadores”, concluyó Galfione, visiblemente angustiado por la situación.
Mientras tanto, la importación de ropa continúa creciendo sin freno, con un total de 12.000 toneladas de prendas importadas en los primeros cinco meses de 2025, lo que contrasta con las 4.800 toneladas de todo el 2024. La falta de controles sobre las importaciones y la desregulación del sector están llevando a la industria textil nacional al borde del colapso, afectando tanto a los trabajadores como a los consumidores.
Fuente: https://www.baenegocios.com